Escribir para mantener

La creación de contenidos para la optimización de motores de búsqueda presenta su propio conjunto de objetivos y desafíos. Teniendo en cuenta la gran cantidad de contenidos nuevos que se abren paso en la red cada día, no basta con dominar los parámetros del SEO. Un contenido eficaz es a la vez estratégico y de alta calidad. Estos sencillos consejos arrojan luz sobre cómo enfocar la redacción de contenidos SEO desde estos dos ángulos, ayudándole a sacar el máximo partido a sus esfuerzos.

  1. ADELÁNTESE CON TITULARES QUE LLAMEN LA ATENCIÓN

Redactar un titular llamativo puede parecer una obviedad, pero no se puede pasar por alto la importancia de este paso. Piense en su titular como la primera impresión, es la primera pieza de información que recibirá su audiencia y determinará si siguen leyendo o no. Así pues, preste a estas pocas palabras la atención que merecen; tómese su tiempo para hacer una lluvia de ideas y aproveche la oportunidad de ser creativo. Elige un titular que sea a la vez informativo e interesante.

  1. MANTÉNGASE REALISTA CON CONTENIDO ORIGINAL Y VALIOSO

Al escribir para el SEO, es importante centrarse no sólo en las palabras clave, sino también en la experiencia del lector, señala la agencia de publicidad en Almería Limón Publicidad. Los artículos, las entradas de blog y los mensajes en las redes sociales eficaces aportan algo de valor a los lectores. Esto significa que tendrá que proporcionar un contenido fresco -no copiado- que sea creíble, útil e interesante. En lugar de centrarse exclusivamente en los productos o servicios de su marca, amplíe sus temas para incluir aquellos que puedan atraer los intereses de su audiencia. El contenido de calidad se puede clicar, compartir y disfrutar de su lectura.

HACER UN GRAN ESFUERZO PARA CONSEGUIR ARTÍCULOS SUSTANCIOSOS

Cuando se trata de escribir para el SEO, la longitud es importante. Lo ideal es que el contenido destinado al SEO tenga entre 300 y 1.000 palabras. Tenga en cuenta, además, que se debe introducir una palabra clave por cada 50-100 palabras. No obstante, evite amontonar las palabras clave, ya que la legibilidad y la credibilidad de su contenido pueden verse afectadas por ello. En su lugar, organízalas a lo largo de tu contenido, para que parezcan más naturales.