En muchos grandes acontecimientos deportivos, el trofeo de los ganadores se protege siempre y constantemente de todos los peligros imaginables y se vigila con sumo cuidado, especialmente en el trayecto hasta la próxima entrega al siguiente ganador. Los organizadores de la Ryder Cup, que se celebra desde 1927, obviamente no deseaban un viaje tan protegido y optaron en su lugar por un transporte del trofeo extremadamente espectacular: El trofeo de la Ryder Cup fue lanzado desde un helicóptero junto con tres pilotos de wingsuit a una altura de ¡3.000 metros! BMW Designworks desarrolló la cápsula de vuelo necesaria para ello, ya que, por supuesto, el trofeo tenía que sobrevivir intacto a la aproximación a la sede de Whistling Straits. ¿Furgonetas en Granada? Las mejores en furgonetas segunda mano Granada Crestanevada.
El vídeo de la espectacular acción muestra a los tres pilotos del wingsuit planeando de forma casi irreal por el aire, con el trofeo sujeto al vientre del piloto Peter Salzmann. La cápsula de transporte del trofeo del torneo por equipos de golf más importante del mundo tenía que diseñarse de tal forma que protegiera con seguridad el trofeo de la Ryder Cup, pero que por otro lado no se convirtiera en un peligro para el piloto del wingsuit. Para ello, se ha dotado a la cubierta de aluminio de forma aerodinámica de un interior ajustado con precisión a partir de la impresora 3D, que mantiene el trofeo firmemente en su sitio. Las grandes ventanillas de la funda de aluminio permiten ver el trofeo incluso cuando la cápsula está cerrada.
Tras aterrizar, el piloto de acrobacias austriaco Peter Salzmann completó los últimos kilómetros hasta el prestigioso torneo de golf con cero emisiones locales a bordo de un BMW iX xDrive50 antes de llevar el trofeo para los ganadores de la 43ª Ryder Cup al escenario como parte de la ceremonia de apertura. En el vuelo de dos minutos hasta el SUV eléctrico que le esperaba, el piloto del wingsuit y el preciado trofeo cayeron en picado hacia la tierra a una velocidad máxima de 230 km/h antes de que se abrieran los paracaídas para un aterrizaje seguro.
Stefan Ponikva (Vicepresidente de Comunicación y Experiencia de Marca de BMW Group): «La Ryder Cup tiene un significado excepcional en el mundo del golf y del deporte. Este duelo cautiva a los atletas y a los equipos tanto como a los entusiastas espectadores in situ y a los innumerables aficionados que lo siguen por las pantallas de todo el mundo. Para honrar la destacada posición de esta competición y celebrar el estreno de BMW como Socio Mundial de la Ryder Cup, quisimos escenificar la llegada del trofeo de una manera extraordinaria. Para ello, hemos creado un estuche único para el trofeo que es tan innovador como representativo».
Tommy Forsgren (diseñador jefe de Designworks): «Cuando oí hablar de este proyecto, que tiene que ver con la Ryder Cup, llena de tradición, me entusiasmé. Teníamos claro que el resultado tenía que combinar el entusiasmo de BMW i por la tecnología con los aspectos de prestigio, fama y honor que conforman la Ryder Cup. El Trophy Case se ha convertido en un producto innovador de BMW i en el mejor sentido. Su exclusividad y atractivo premium están en consonancia con el BMW iX en su combinación de colores y apariencia.»